El ex juez que condenó al represor disertó en Mar del Plata y opinó sobre la revocatoria a la prisión domiciliaria del represor.
“Nadie puede discutir que la vuelta de Etchecolatz a cárcel común, la revocatoria de la prisión domiciliaria, fue un triunfo de la gente de Mar del Plata”, afirmó el ex juez federal Carlos Rozanski, uno de los magistrados que con sus fallos condenó al represor.
Rozanski hizo esas declaraciones en el marco de la charla que brindó junto a la diputada nacional Fernanda Raverta denominada “Los vaivenes de la Democracia, en busca de los derechos perdidos”, que se concretó con la organización de Abrazo Ciudadano en el Centro Cultural La Casa de Enfrente por el Mes de la Memoria.
“Es muy importante la presencia del juez Rozanski en este momento en Mar del Plata, porque él es emblema en los juicios de lesa humanidad, sus sentencias recorrieron el mundo entero y porque es quien juzgó a Etchecolatz y sabe mejor que nadie lo que nuestra comunidad hizo para que le revoquen la prisión domiciliaria”, destacó, por su parte, Fernanda Raverta en la misma charla, que se desarrolló después de la habitual marcha de los jueves de Madres de Plaza de Mayo de Mar del Plata, de la que participó también el ex magistrado.
“También valoramos mucho las y los marplatenses que hoy Carlos pueda acompañarnos en la Marcha de las Madres de este marzo que es el Mes de la Memoria, justo en el tiempo en el que hay quienes creen que los genocidas pueden volver a vivir en sus casas”, remarcó también la referente de Unidad Ciudadana Mar del Plata.
“Son momentos en los que el Poder Ejecutivo, desde el Servicio Penitenciario, confeccionó una lista que incluye entre delincuentes comunes más de cien genocidas, entre los cuáles está Astiz, con lo que ello significa para los marplatenses”, agregó Raverta en el mismo sentido.
“Por eso, desde Mar del Plata, lugar que supo responder ante la injusta e inaceptable decisión del Poder Judicial de darle domiciliaria a Etchecolatz , desde esa lección de ciudadanía que nos dieron los vecinos del Bosque Peralta Ramos y toda la comunidad que participó en el reclamo, ahora debemos rechazar esas listas para impedir que Astiz este en libertad”, agregó Raverta.
Justamente Rozanski, que condenó cuatro veces a Miguel Etchecolatz, la primera de ellas a reclusión perpetua e instaurando por primera vez la figura de genocidio en los juicios a la dictadura cívico militar 76-83, explicó en la charla que “la prisión domiciliaria no es un figura que este preparada para abarcar los delitos de lesa humanidad, porque justamente está prevista para causas humanitarias”.
“He intervenido en causas que involucran a Etchelolatz ya desde el 2004,-reseñó Rozanski-, cuando todavía estaban vigentes las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, afortunadamente después de 2006, ya derogadas esas leyes, pudimos avanzar y hay cinco condenas firmes sobre Etchecolatz, confirmadas por la Corte Suprema, por crímenes atroces, por lo cuál de ninguna manera puede tener el beneficio de prisión domicialiaria”.
“Este tipo de lucha da sus frutos, estas reacciones y estas decisiones que tienen que cambiar empoderan a la gente”, remarcó también el ex juez sobre la participación de los marplatenses en masivas manifestaciones de repudio a la prisión domiciliaria para Etchecolatz.
En cuanto a “Los vaivenes de la Democracia”, tema de la charla que brindó con Fernanda Raverta, Rozanski que “aquello que se logró no tiene retorno”, en cuanto a los civiles de la dictadura que se pudieron condenar. El fue el presidente del Tribunal que logró la primer condena a un funcionario civil de la dictadura, James Smart, junto al juez marplatense Roberto Falcone y Mario Portela. “Ambos son extraordinarias personas y jueces y queridísimos amigos-recordó-, y por esa condena a Smart recibimos muchas presiones, con editoriales en diarios en contra nuestra, por los cuáles hicimos denuncias penales, pasa que a nadie le conviene que se avance con los civiles de la dictadura”. “Ahora, por los cambios de tiempos políticos, se detuvo esa dirección, pero aquello que ya se logró no tiene retorno”, remarcó Rozanski.
“Porque nos tiene que quedar claro que los civiles no han sido cómplices, han sido parte de la dictadura”, remató enseguida.
“Es cierto que ahora estamos viviendo tiempos de mucho autoritarismo y duele mucho atraversarlos pero no se vuelve a cero: nosotros hemos vivido en doce años la experiencia de adquirir derechos, del reconocimiento de derechos, y tarde o temprano la sociedad se dará cuenta que nos podemos respetar de otra manera y que merecemos vivir de otra manera, como hace un tiempo”, recordó también Rozanski.
El ex juez federal participó, en efecto, junto a la diputada nacional Fernanda Raverta, de la tradicional marcha de los jueves con Madres y Abuelas de Plaza de Mayo de Mar del Plata. Y al recibir el cariño de ellas, que asistieron a la charla, explicó: “ellas me quieren y me recuerdan porque tuve participación en un juicio muy importante que se hizo en Mar del Plata, el primero con condena en delitos de lesa humanidad (el caso Labolita) y ahora me abrazan y me dicen que ven en peligro los avances que se habían logrado en la Justicia en materia de derechos humanos”.